lunes, 31 de agosto de 2020

Se (nos) va D10S (adéu)


14 de diciembre del 2000, Carles Rexach formalizó el contrato que ligaba a Leo Messi con el F.C. Barcelona en una servilleta de bar, hoy ese trozo de papel nostalgia se exhibe en el Museu del Barça.

25 de agosto de 2020, el jugador envía un burofax al club indicando su intención de abandonar la entidad. Despedirte así de tu jefe no está al alcance de cualquiera y más si el susodicho es un calzonazos de la talla de Nobita Bartomeu.

20 años no es nada, como cantaba Carlos Gardel en aquel genial tango argentino: “Sentir que es un soplo de vida, que veinte años no es nada, que febril la mirada, errante en las sombras, te busca y te nombra…”

Ilustración: Ferran Martín

sábado, 29 de agosto de 2020

Noche cerrada – Chris Offutt

“Mi padre plantó un huerto en el que se colaban los mapaches. Se cansó de que se lo dejaran siempre hecho unos zorros y se comieran lo mejor. Al final tomó una determinación, la mitad del huerto sería para él y la otra mitad para los mapaches. Tendió una cuerda alrededor y colgó unas latas de manera que traquetearan en cuanto las tocaran. Luego se pasó unos cuantos días echándose a dormir ahí fuera con un calibre veintidós y cuando las latas lo despertaban, trataba de identificar dónde estaba el mapache. Si estaba en el lado del huerto que le correspondía, lo dejaba en paz. Pero si a alguno se le ocurría colarse en el otro lado, le pegaba un tiro. Al día siguiente lo despellejaba y colgaba la piel en un palo. Se ventilaba dos o tres por semana. Al final, los mapaches comprendieron cuál era su lado del huerto y se mantuvieron alejados del otro.”

viernes, 28 de agosto de 2020

Gent normal – Sally Rooney



“La gent l’ha oblidat. Ara és una persona normal. Ningú aixeca la vista quan passa pel seu costat. Va a nedar a la piscina de la universitat, menja al Dinning Hall amb els cabells molls, al vespre passeja pel camp de criquet. Ella troba Dublín extraordinàriament bell quan fa un temps humit, la manera que té la pedra grisa de tornar-se negra, la pluja movent-se entre l’herba i xiuxiuejant per damunt de les teules relliscoses dels teulats. Gavardines que rellueixen sota la llum submarina dels fanals. Pluja de plata com xavalla enmig de les llums del trànsit.”

miércoles, 26 de agosto de 2020

Apuntes para un naufragio – Davide Enia


“La bruma emborronaba el campo visual.
La línea del horizonte temblaba.
Constataba por enésima vez hasta qué punto me asombraba la capacidad de Lampedusa de desequilibrar a sus huéspedes, creando en ellos un fuerte sentimiento de alienación. El cielo tan cerca que casi se te viene encima. La voz omnipresente del viento. La luz que golpea por todas partes. Y ante los ojos, siempre, el mar, eterna corona de gozo y espinas que lo circunda todo. Es una isla en que los elementos te caen encima sin que nada se lo impida. No hay defensas. El ambiente te perfora, atravesado por la luz y el viento. No hay refugio posible.”

martes, 25 de agosto de 2020

Desierto sonoro – Valeria Luiselli


PARTIDA

“Bocas abiertas al sol, duermen. Niño y niña: frentes perladas de sudor, cachetes colorados, hilos de baba seca. Ocupan toda la parte trasera del coche –extendidos, despatarrados, rotundos, plenos-. Desde el asiento del copiloto me volteo para mirarlos cada tanto, y luego sigo estudiando el mapa. Avanzamos rumbo a la periferia de la ciudad con la lava lenta del tráfico, que se mueve por el puente George Washington para disolverse, más adelante, en la autopista. Un avión sobrevuela y deja una cicatriz blanca en el paladar azul del mediodía. Mi marido, al volante, se ajusta el sombrero y se seca la frente con el dorso de la mano.”

lunes, 24 de agosto de 2020

Caballos salvajes – Jordi Cussà



     “El telenoticias dice que con el mes acabará abruptamente el otoño y el termómetro registrará nevadas por encima de los ochocientos metros. De cara al buen tiempo que se avecina, me he procurado veinte mil pelas de televisor y me esfuerzo en verlo un par de horas cada día para no perder el contacto con la civilización. También me ayuda a combatir los tedios de después de comer y algún que otro encharcamiento mental nocturno por exceso de concentración creativa. En Malanyeu, en cualquier caso, hace una hora que nevisca, pero quizá solo sea ventisca, porque el mistral sopla tan alegre como helado. En la chimenea chisporrotea una tea que he endilgado para hacer lumbre, y el noticiario sentencia que allí donde no nieve lloverá a cántaros. ¡Que llueva, chubasquee y diluvie –me digo, resentido de tanto otoño y aislamiento- hasta anegar la térmica de Cercs!
     Me trago el primer anuncio y el último bocado de pan con tomate y anchoas, y me planteo una caña de maría del país y medio carajillo de escocés mientras apago la tele.”

Atrapa la llebre - Lana Bastašić





“No puc recordar, ni tan sols en favor del relat, com m’ho vaig fer per trobar el petit restaurant tradicional en què treballava. Només recordó que Mostar brillava com una cafetera de coure, encara que el dia era inexplicablement llòbrec, tenint en compte la calor insofribre. Recordo els turistes i els seus para-sols sintètics. Estaven escampats pel Pont Vell com corones de flors de plàstic en una tomba important.”