Cada persona brilla con luz
propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y
fuegos chicos y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno, que ni
se entera del viento, y hay gente de fuego loco, que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden vida con
tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se
enciende.
«El libro de los abrazos» -
Eduardo Galeano
Siglo XXI de España Editores –
2011
Foto: Internet