«Durante leguas y leguas, el
desierto es en cada una de sus partes siempre idéntico a sí mismo. Únicamente
la luz cambia: el sol periódico se levanta al este, sube lento y regular hasta
el cenit y después, con la exactitud ritual con la que ha alcanzado el punto
máximo del cielo, desciende hacia el oeste y por fin, volviéndose enorme y de
un rojo que empalidece y se enfría poco a poco, cintilando con una luminosidad
familiar quizás en el espacio infinito, pero extranjera aquí abajo, se hunde en
el horizonte y desaparece, cubriendo todo con la negrura viscosa de la noche
hasta que, unas horas más tarde, por el este, vuelve a aparecer.»
Publicado por Muchnik Editores. Primera edición: febrero de 2002 (La primera edición de esta novela apareció en la editorial Seix Barral Argentina en 1997). 185 páginas.