Ayer vimos “El 47” (Marcel
Barrena, 2024). Basada en hechos reales acaecidos en aquella Barcelona
contracultural de los años 70 del siglo pasado que ya solo parece habitar en el
olvido ha conseguido tocarme la fibra como hijo del extrarradio barcelonés. Sin
ser una película redonda, alguna laguna en el guion, me parece muy recomendable
para interesados en temas sociales por la fidelidad en el retrato o recreación de
aquella época en que las asociaciones vecinales consiguieron tantas y tantas
cosas a base de lucha y cohesión humana, algo que a día de hoy, en que a duras
penas llegas a conocer al vecino de rellano, parece poco menos que imposible.
Con un reparto ajustado, enorme una vez más Eduard Fernández con olor a Goya, y
un metraje algo escaso (el salto temporal queda cojo desde aquel 1958 en que
arranca la película, algunas imágenes antiguas metidas con calzador, hasta 1978
cuando acaba desarrollándose el zenit argumental), la película se sostiene muy
dignamente a través del trabajo conjunto de todo el equipo.
Rescato de la BSO su canción principal, “El borde del mundo” interpretada por la artista canaria Valeria Castro, que pueden escuchar/ver junto al tráiler de la peli: AQUÍ