miércoles, 9 de septiembre de 2020

Desnudo en Garden Hills – Harry Crews

“Ella lo veía en los ojos de los hombres, lo detectó cuando no era más que una cría. No la amas, la violas; no la acaricias, la golpeas. Ella era habitaciones oscuras y camas deshechas. Ella era lo que nunca se saciaba en el alma de los hombres, la bestia que habitaba en la jungla de cada uno de ellos. Por lo tanto, todos los hombres deseaban poseerla, pero ninguno conservarla. Ella había visto cómo se desenfocaban discretamente los ojos de los hombres. Había visto cómo se les ensanchaban las narices y se les agrietaban los labios. Le daban cosas: regalices y caramelos de limón cuando era pequeña, luego, al crecer, dinero. Apretaban una moneda caliente de medio dólar contra la palma húmeda de su mano y, luego, mientras se quedaba muy quieta, toqueteaban a escondidas sus lugares secretos.”