Que ayer en Anoeta (ahora sí un bonito campo de fútbol,
cuando lo acaben ¿eh?, una vez eliminada la pista de atletismo que impedía que
los jugadores locales sintiesen el calor de la grada… ah! aquellos recuerdos
del viejo Atocha) el mejor jugador del Barça haya sido su portero indica que
hay muchas cosas a corregir y muchas rotaciones por ajustar/decidir: Semedo no
acaba de afianzarse en el lateral derecho, Rafinha es el puto clon de André
Gomes… o, lo que es lo mismo, un estorbo para el engranaje del conjunto,
Rakitic es imprescindible pero no en el sitio de Busquets, a Coutinho va a
costar hacerle hueco porque yo personalmente no sacrificaría al mosquito
Dembélé que ha empezado el curso como un tiro, etc, etc…
Tuvimos suerte, jugamos un partido sencillamente espantoso,
dos goles de córner (un lance que normalmente seguimos sin saber aprovechar
vete a saber por qué, Txingurri) con sendos rebotes afortunados en 3 minutos
locos… antes de ello, Ter Stegen (el mejor portero del mundo en mi opinión
aunque en Alemania lo sigan viendo como suplente en su selección) evitó el 2-0
y el 3-0 del equipo donostiarra en sendos mano
a mano ante –creo recordar- Theo y Juanmi… y después, ya con el 1-2, tuvo
otra intervención decisiva para evitar el empate. Máster en cancerbería
arquera, por lo menos, a las pruebas, demostrables a cada partido bajo palos, me
remito.-
R. Sociedad - 1
(Aritz Elustondo)
Barça - 2
(Luis Suárez, Dembélé)
Nota: La foto no es de ayer, es de la temporada pasada en
Balaídos (Vigo), sencillamente magnífica. Desconozco el nombre de su autor,
siento no poder mencionarlo, pero la instantánea me parece merecedora de ganar
algún gran premio de fotografía deportiva.