“Con una fuerza de cerca de sesenta mil hombres de armas
rodeando el castillo, no quedó ni un resquicio por el que escapar, de tal modo
que ni una hormiga hubiese podido salir sin ser detectada. El señor Nobunaga
dirigía el ejército, y junto a él participaban guerreros de gran fama y valía,
como Shibata Katsuie, Niwa o Sakuma Uemon. Entre ellos se encontraba el señor
Hideyoshi, quien en aquella época llevaba por nombre Tokichiro y cuya misión
durante el asedio fue la de construir un fortín en la montaña Tora Gozen, a una
distancia de ocho cho* del castillo,
desde donde vigilaba lo que ocurría en su interior.”
*Un cho equivale a
109.09 metros, por lo que ocho cho serían unos 873 metros.
Krustcomentario: Mira que me gusta Tanizaki, pero este es el
primero de sus libros que no me ha acabado de convencer. Relato breve que
cuenta la historia de Yaichi, un ciego, músico y masajista de profesión, en el
Japón medieval de la segunda mitad del siglo XVI (muy buena la ambientación,
sin duda lo mejor del libro…); es posible que se deba a la proliferación de
tantos nombres en un relato tan corto (para muestra el botón del post) lo cual me
ha hecho bastante difícil el seguimiento de la historia. Eso sí, excelente la
edición de la editorial Satori, con impecable traducción a cargo de Aiga
Sakamoto, y que contiene varios extras como un glosario con términos japoneses –ese
cho del fragmento, por ejemplo- además de mapas
muy ilustrativos de las antiguas provincias del Japón, etc… ah, bueno, tampoco
está mal el prólogo titulado ‘La destrucción o el amor’ firmado por el pedorro
Sánchez Dragó…