jueves, 9 de junio de 2011

Set ball


Basada en un relato breve de Julio Cortazar, esta es una película alucinante en cada uno de sus 111 minutos de metraje.
Thomas es un fotógrafo de moda, un tipo curiosísimo que vive su profesión con una entrega absoluta, se gana la vida retratando los delicados encantos de deliciosas modelos de pasarela: ropitas de vestir y lencerías de-Svestir, zapatitos, posturitas, bisutería, en fin esas cosas que tanto venden en estos tiempos modernos, a pesar de que nunca fueron tan futuristas como en aquel año 1966 en Londres; pero lo que realmente le hace disfrutar es el trabajo de calle, de campo, la anécdota que sucede en un instante y que el objetivo de su cámara atrapa antes de que se pierda en la memoria del olvido...
Es una peli tan sesuda como fascinante que contiene dos o tres pasajes memorables que forman parte de un conjunto tan extraño que puede herir la sensibilidad cinéfila de muchos espectadores, a mí me gustó mucho en particular esta parabólica escena en la campiña inglesa... porque la vida es como es, y todos tenemos una, pero cuando acechas sigilosamente un paisaje cualquiera armado hasta los dientes de carretes fotográficos, otra historia paralela puede desarrollarse dentro de tu cabeza, y esa amig@ mío, esa… es solo tuya. Que no se te escape, dispara!!!

“Blowup, deseo de una mañana de verano” – Michelangelo Antonioni (1966)