lunes, 19 de abril de 2010

Des-Conectando

Tomando oxígeno, llenando las botellas pulmonares… vuelta a casa. Inmersión en la cruda realidad. Glu-glu-glu… Algún día volveremos, para quedarnos.

El turismo rural es una historieta que aparte de estar poniéndose de moda entre la gente a la que le gusta desconectar de sus problemas cotidianos provocados por el trabajo o los estudios, el stress que provoca una gran ciudad, o simplemente huir de las interminables obras o de la rutina familiar, en una escapada express, findes básicamente aunque como casi todo, esto va a gusto del consumidor, ya que esta modalidad se suele pagar por días de estancia; te proporciona unas sensaciones de aquellas que calan hondo, y que el subconsciente te traerá de vuelta cuando más las necesites, a la vez que te enseña a respetar a la Mother Nature abriéndote los ojos para que te des cuenta, de una puta vez, de lo pequeñísimo hijo de la insignificancia que eres con respecto a ella…
Olor a tierra mojada y a leña ardiendo en una chimenea, sabor a pan cocido en horno de piedra (con tomate, aceite y sal por supuesto) y a vinito de la casa que dicen los médicos que es aconsejable tomarlo con moderación, y dejarse llevar por senderos de aventura visual, guiados por el trino musicado de esos pájaros imposibles hasta donde el río de la vida, siempre sonando de fondo, te lleve… Paco, mi amigo ecologista, lo explicaría mejor, con la naturalidad y la experiencia que requiere el tema.
Esta masía, decorada con un buen gusto exquisito, ofrece al visitante un acogedor rincón donde aparcar la mochila de noche, descansar como un cabrón en una de esas camas antiguas desde las que no se oye ni el susurro de las estrellas que brillan en la oscura noche exterior, tomar una ducha salvaje al día siguiente (que importante es que funcione la regulación de los grifos como diosmonomando manda, je!), e incluirte un desayuno de campeón, ni las migas vas a dejar, para la jornada que te espera por el precio de 75€ x día la habitación doble (ejemplo: 2 personas – 2 noches – 150 €).
Supongo que las habrá más baratas, iguales o más caras, pero la extrema amabilidad de los propietarios, Yolanda y Guillem son una pareja joven que cierto día abandonaron Barcelona y se montaron el negocio trayéndose de la city solo a sus dos críos peques y a sus cuatro impresionantes gatos (que ejercen también de dueños moviéndose por toda la casa a su antojo), además de las maravillas que ofrece su enclave en un radio de acción de 25km (Banyoles, Figueres, Olot, o sur de la France, Perpignan…), hacen de este uno de esos sitios que vale la pena descubrir, disfrutar… y regresar algún día. Seguro.-

IMPRESCINDIBLE :
• Teatre Museo Dalí – Figueres – 11 € x persona
• Besalú – Pueblo medieval ( a 3 km. de la casa ).
• Lago de Banyoles – Se recomienda bordearlo a pie, 2 horas aprox.




FICHA :
· Nombre: Extèmpora
· Dirección : Cal Noi de l´Avi, s/n - Maià de Montcal - Besalú - Girona
· Teléfono: (972) - 59.04.54
· Página Web :
http://www.extempora.cat/